Malposición de pestañas o Triquiasis
¿Qué es?
La triquiasis es la anormal dirección del crecimiento de las pestañas. Algunas pueden crecer hacia el ojo generando mucha molestia. Se produce irritación ocular, ojo rojo, secreciones, sensación de cuerpo extraño, lagrimeo. El raspado contínuo de las pestañas sobre la superficie ocular puede generar úlceras de córnea con mucho dolor que además pueden infectarse.
¿Porqué se produce?
Son muchas las causas de la malposición de pestañas, pueden producirse por inflamación, traumatismos y cicatrices que traccionan, pueden ser congénitas, incluso por tumores. La causa más frecuente está relacionada a la inflamación crónica del borde del párpado por blefaritis o disfunción de glándulas de Meibomio que a la larga afecta la raíz de las pestañas y su dirección de crecimiento.
Tratamiento
El tratamiento dependerá del número de pestañas y la extensión de párpado afectado. La depilación manual con pinza de cejas es poco efectiva ya que vuelven a crecer y cuando lo hacen son más duras con el extremo más firme produciendo más daño sobre la superficie ocular.
Cuando la afectación es difusa y una gran extensión de párpado está afectada, se requieren cirugías que buscan reorientar todo el borde palpebral alejando las pestañas del ojo como es la fractura tarsal o la separación de lamelas.
Algunos casos severos requieren injertos de mucosa bucal sustituyendo el sector de pestañas triquiásicas.
Cuando están más localizadas se puede resecar el sector de párpado (resección en cuña) o aplicar crioterapia (frío).
En los casos que son unas pocas pestañas mal direccionadas se recomiendan técnicas menos invasivas que no lesionen el tejido adyacente a la pestaña. Está descrito el tratamiento con láser de Argón pero es una técnica dolorosa y además tiene un gran porcentaje de recidivas.
Se ha visto mayor efectividad en la técnica de Radiofrecuencia que consiste en introducir en el folículo una aguja descartable muy fina a través de la cual se pasa una corriente de alta frecuencia que genera calor destruyendo la raíz sin dañar la piel. El porcentaje de recidivas es significativamente menor. Se realiza con anestesia local de forma ambulatoria respetando el borde del párpado, preservando su anatomía y función.